Todos debemos terminar nuestro camino, pero la gracia consiste en cómo.
No me gustaría que me matara un ultraderechista; ni ser la
víctima 107 del País Vasco muerta en el tajo; tampoco
ser la mujer palizada por su marido; o uno de los migrantes
caídos camino del sueño europeo (56 en un cayuco hace nada; 52 más, a los
pocos días). Un muerto de esa Guerra de Irak que apenas tiene ya eco en
los medios. Ni, por supuesto, uno de los miles pasto de la naturaleza
en Bangladesh. No.
Desde el verano, Vizcaíno
(y alguno más) viene haciendo el recuento de los muertos en accidente de
trabajo en el país. Es una labor tremenda pero necesaria. Batimos las marcas
europeas en la modalidad, pero no parece que seamos capaces de
planteárnoslo.
Cuando leí la noticia
del trabajador muerto en una obra cercana, me acordé de mi primo Agustintxo
y de cómo murió en el tajo el 20 de junio de 1985. Había convocada huelga ese
día, pero no la secundamos (hoy me he enterado que resultó una convocatoria masiva
contra el sistema de pensiones). Yo estaba a punto de cumplir diecisiete
años (como Carlos, el asesinado la semana pasada en Madrid por un
ultraderechista) y aquél era mi primer trabajo asalariado. Agustintxo tenía
unos años más que yo. Era mi tercer día en el currelo y el accidente se produjo
en una obra de la calle Legazpi de Donostia. Estábamos reformando una bajera.
Recuerdo también que me dijeron que un vecino subió las escaleras del portal
mascullando "lo tenéis merecido". Quiero pensar que
el tipo desconocía el estado real de mi primo. Quiero pensar eso.
Eso. Ayer terminó su camino Josemari Ortiz.
No murió en el tajo. Menudo era él.
Hoy me han llamado de Más que
palabras para hablar de nuestro Txoko
del Narrador. Me ha gustado la introducción de Javier, porque ha hecho un elogio
de las cosas pequeñas. Estoy totalmente de acuerdo en ese punto (en
otros también, todo hay que decirlo).
Los grandes espectáculos ocupan demasiado espacio en nuestra sociedad y,
muchas veces, nos lleven a perder la cabeza. Si eres futbolero, como lo soy yo,
prefieres que tu equipo esté en Primera y jugando la Champions League;
no jugando en Segunda y sudando tinta para ganar un partido. Si eres artista,
no es lo mismo estar en el Victoria Eugenia, en una casa de cultura o en un
local de la periferia.
Esta semana el Ateneo Kabigorri de Irun ha cumplido diez años. En la nota de prensa remitida a los medios de
comunicación, recordaban que en 1997 surgieron en el País Vasco dos proyectos a
tener en cuenta: Kabigorri y Guggenheim. Me hizo gracia la
comparación y me reí al leerlo.
Las cosas del día a día, sin embargo, son cosas pequeñas normalmente,
pero son las que más placer nos dan:
comprar los periódicos, tomar café, comer, beber un par de cañas, hablar con
los amigos. No vivimos ni en Nueva York ni en Beijing, sino en un pequeño
pueblo provinciano que pretende ser ciudad.
Y eso no es malo. He comprado los periódicos por la mañana y he ido en
pantalón corto al Polideportivo. Cinco minutos. He leído las
malas noticias del día encima de una bicicleta estática. Una ducha y cinco
minutos más para poner los pies en casa. Al atardecer tengo apuntado en la agenda
el concierto de Devendra Banhart.
Quince-veinte minutos desde casa. Mi currelo también lo tengo a tiro de piedra.
A menudo son las grandes cosas las que nos enloquecen. Por
seguir con el fútbol, se toma como algo normal que un jugador diga adiós a su
club de toda la vida porque un club foráneo le ha puesto un saco de dinero
encima de la mesa. Depende, diría yo. Si estás bien donde estás, con
dinero suficiente para el futuro, ¿Por qué tienes que irte? ¿Por dinero? ¿Por
la fama? ¿Por ponerte nuevos retos?
Hoy sólo pretendía hacer un elogio de las pequeñas cosas. Sin más.
La púrpura prefiero dejársela a otros.
Hoy me he acordado de que no había contado nada aquí de la exposición Euskadi
Fantástico III que tenemos en la casa de cultura. Entre otras cosas,
me ha servido de recordatorio escucharle decir a Gari que esta noche debía
escribir ocho mil caracteres sobre el cómic. Eso ha sucedido en la puesta de
largo del nuevo diseño del diario Irutxuloko
Hitza.
Menos mal que E-gor
nos hace caso y este año también ha cumplido con su cometido de poner en la red
información sobre ésta y otras actividades de las IV Jornadas de
Cómic.
Éste es el cartel anunciador, obra del comisario Iñaki Holgado. En el Centro Cultural Ernest
Lluch se muestra este año parte de la obra de Raquel Alzate
y Jose Angel Lopetegi. La exposición está abierta al público hasta el próximo
24 de noviembre, de lunes a viernes, entre las 16:00 y las 20:30 horas. Los sábados,
entre las 17:00 y las 21:00 horas.
Si eres aficionado al cómic, quizás te mole la visita guiada de este viernes, 16 de noviembre. A las 18:00
horas estarán presentes ambos autores.
Hemos pasado el fin de semana en Catalunya. El viernes por la mañana nos
montamos en el coche y siguiendo las indicaciones de Maripuri
conseguimos llegar sin mayores novedades al pueblo de La Vajol. La excusa era la presentación del
último libro de Assumpta
Montellà. Se titula "El setè camió. El tresor perdut de la República"
y la gracia del asunto, entre otras cosas, consistía en asistir a la
presentación del mismo en el lugar donde tuvieron lugar los hechos: el
bunker de Negrín, en la Mina Canta.
Dice
Assumpta que nos reunimos en torno a trescientas personas en el
citado lugar el viernes por la tarde. La cifra no es moco de pavo, teniendo en
cuenta que La Vajol está a unos diez kilómetros de La Junquera. Allí residen un
centenar de personas. Desde Barcelona tienes hora y media de camino, por
ejemplo. Algunos de los presentes nos acercamos desde el País Vasco (Txaro Barinaga y Liki, por ejemplo),
otros desde Madrid, pero la mayoría eran, obviamente catalanes:
de Mataró, de Igualada, un grupo grande de Cardedeu…
Assumpta se ha hecho con un nombre en su país tras la publicación de La maternitat d´Elna, libro que
narra la emocionante y emotiva historia de la heroica Elisabeth
Eidenbenz.
La historia de este último libro también sucede en la Guerra Civil, entre 1938-1939.
Cuando Negrín era el jefe de gobierno, el patrimonio de la
República, incluidos el oro del Banco de España y los cuadros del Prado, fueron
llevados a La Vajol. Para su depósito expropiaron la mina de la familia Giralt,
dejaron sin trabajo a los obreros de la misma y se rodearon de mineros de
confianza de Cartagena, así como de carabineros del presidente, con la
intención de construir un bunker en el lugar.
En enero del 1939 estaba claro que la República perdería la guerra contra
Franco. En los últimos días de finales de enero y los primeros de febrero, La
Vajol se convirtió en la capital de la República, pues allí estaban el
presidente Manuel Azaña, Negrín, el
lehendakari Agirre, el president Companys…
Durante los primeros días del mes de febrero, todos, incluido el tesoro, fueron sacados de La Vajol y cruzaron la frontera bajo las bombas de la Legión Cóndor.
Todo fue llevado deprisa y corriendo ¿Todo?
En el camino se quedó un camión, bautizado con el cinematográfico título del séptimo
camión.
Assumpta, historiadora concienzuda, hace gala de un estilo novelesco que atrapa
al lector. A la hora de la narración se ha servido de varios colaboradores:
Miquel Giralt, el hijo del dueño de la mina, un mocoso de 9 años
cuando sucedieron los hechos, y uno de los principales responsables de que el
lugar se haya mantenido mal que bien hasta ahora; el hijo del carabinero que vigiló el séptimo camión; el sobrino de la persona que transportó con
sus mulos el tesoro.
Este hombre también tiene su parte de responsabilidad en el renacimiento de
la historia (también en el caso de la Maternidad de Elna). Se llama Miquel
Torner y es marxaire de Mataró, uno de los que ha recuperado también
el Camino del Norte o la Ruta
del Exilio.
Una amiga catalana me contó que estuvieron hace poco en uno de los
conciertos de la gira del último
disco de Quimi Portet. La cosa se
celebraba en un teatro. En medio de la actuación, Quimi propuso al público que
por qué no se iban todos a tomarse una cervecita en el bar de la esquina. Dicho
y hecho: paró el concierto, se tomaron unas birras y vuelta.
Así es el señor Portet. Por lo tanto, no es extraño que conceda entrevistas tan
inusuales como ésta.
El domingo por la tarde la cita era en el Doka donostiarra. A las ocho y media.
Quimi ha ofrecido cuatro conciertos esta pasada semana en el País Vasco. En un par de ellos, le ha
acompañado Ruper, pero el domingo
descansaba. 60-70 personas. En vez de decir que éramos pocos, es mejor decir
que éramos una audiencia selecta. Estoy seguro de que aumentará la próxima vez,
porque el músico ha conseguido una gran comunicación con el público.
Quien quiera acercarse a su música sepa que no tiene nada que ver con lo que
hacía con Manolo García en El Último de la
Fila. El de Vic ha aparecido acompañado de tres músicos: el bajista Antonio
Fidel, el guitarrista Jordi Busquets y el baterista Xarli
Oliver.
La música podría etiquetarse, tal y como hace su bajista, como pop
fácil. Quimi divide la oferta en dos partes: la primera, más popular;
la segunda, más intelectual. ¿La diferencia? En esta segunda
parte es necesaria una carrera para poder seguir la actuación.
Como tantas cosas suyas, no conviene tener en cuenta la división. El
cantante hace uso de la ironía (sutil y fina mayormente, más
ácida en ocasiones) para presentar los temas y la banda. Alguno dirá que tiene
una pedrada del quince, pero por encima de ello está un pedazo músico.
Una muestra poética de su filosofía: "I en el teu parrús vull quedar-m´hi acampat".
Con este trío ha grabado el disco "Crossing time"
para una compañía vasca que dice tener todo su catálogo en iTunes. Se trata de Etxe-ondo
(tengo dudas: ¿las demás no tienen su catálogo en ese escaparate?). En "Crossing
time", Iñaki lleva el acordeón por terrenos jazzies. Aparte
de tocar algunos clásicos, también ha grabado varias composiciones propias. La formación
la completan el baterista Igor Telletxea y el bajista Ritxi
Salaberria. Le ha costado lo suyo, pero ya está ofreciendo varios conciertos
de presentación en el País Vasco (fuera le ha costado menos).
De todas formas, me da que a partir de ahora será más conocido en el País Vasco
por rular por ahí con el Circo del Sol.
Según cuenta, su mujer le comentó que dicha multinacional del espectáculo buscaba
músicos. Tras ponerse en contacto con ellos, le pidieron tres vídeos.
Grabó las tres piezas y se las envió.
Cuando ya se había olvidado de ello, recibió una invitación para ir a un casting
en París. A los efectos, la compañía divide el mundo en dos: unos
para Chicago, otros para la Ciudad Luz.
Tras superar la prueba parisina, le han contratado y está a la espera de que
le llamen dentro de varios meses para girar por el mundo durante un par
de años, acompañado de su mujer y sus dos hijos.
Sólo conozco otra artista vasca que haya hecho lo mismo: la
payasa Virginia Imaz, de Oihulari Klown.
Por cierto, ni Iñaki ni Virginia estarán el 23 y 24 de noviembre en el Velódromo Antonio Elorza de Donostia. Según
la web, está todo el taquillaje
vendido.
El Diario Vasco le dio amplio
espacio ayer domingo al grupo
inversor chino que quiere hacerse con el 35 % de la Real. La
compañía se llama Lighthouse
Consulting Limited. "¡Coño!" pensé "estos también se han
dado cuenta de que para controlar el club txuri-urdin es necesario el
beneplácito del hermano giputxi del grupo Vocento". Y Vocento ha puesto en
marcha la maquinaria. Y he leído la información. Y me ha parecido que no había
filtros en ella. Es decir, que ha pasado casi directamente del informe
preparado por Iñaki Badiola y cía a las páginas y la web del
periódico.
En cuanto al fútbol, se dice que lo conveniente sería una buena combinación
entre cantera
y fichajes punteros. El Mundo Deportivo, incluso, ha citado el nombre de Riquelme
como un hipotético fichaje.
¿Quién es Iñaki Badiola? ¿Qué es Lighthouse Consulting Limited?
Su nombre ha salido a la luz la pasada semana. Iñaki se debió de entrevistar
con María de la Peña y varios miembros del Consejo de Administración
del club realista.
He preguntado en mi entorno y me han dicho que es un tipo que pasa de los
40. Un hombre de negocios que guarda las formas. Muy poco, por lo tanto.
Le he preguntado a google
por Iñaki Badiola Menéndez y únicamente aparecen las carreras
pedestres en las que ha participado y las marcas que ha logrado.
Si pongo Ignacio
Badiola Menéndez, sólo aparecen tres referencias del hombre de negocios.
Por cierto, el periódico decía que se ha forjado en el Grupo
Santander.
En busca de imágenes, lo único que he podido rescatar es una mala fotografía
en la web de su club de atletismo, Donostiarrak.
Éste es un club local que participa en pruebas populares. De vez en cuando deja
algún mensaje con su nombre y apellido en la web. Por ejemplo, en este mensaje donde
habla del paso de un equipo de chavales por la Donosti Cup. Otro socio, en una crónica de una
carrera, le llama Torito.
Por lo que respecta a la empresa, y dejando a un lado los
artículos aparecidos los últimos días en las páginas deportivas, hay muy poca
información en la red. He puesto Lighthouse Consulting Limited
en google.
En la segunda hoja de resultados, aparece esta info. Llama la
atención el nombre de la web: alibaba.com.
"Lighthouse consulting limited is a consulting and trading company
based in spain and hong kong. We provide consulting and trade related services
to industrial companies in europe and latin america. We cover sectors such as
automovile, construction, machinery, tobacco, toys, etc. We help our customers
in areas such as outsourcing, maket penetration, and m&a".
Si hacemos caso de esta web, es una compañía pequeña: no
tiene cinco empleados y su volumen de negocio anda en torno al millón de
dólares. Por tanto, parece que hay alguien más detrás de esta operación.
Conclusión
No tengo opinión formada aún. Me falta información. Seguro
que los próximos días saltan más noticias.
Actualización 22:30 horas: El Mundo Deportivo señala que quieren renovar a Xabi Prieto y fichar a Riquelmeaquí. Asimismo, pretenden que Santos sea miembro del Consejo de Administración y Arconada el presidente, aquí. Veremos.
Ibarretxe dijo el
otro día que "el género humano es especialista en seguir
cavando cuando está en un agujero muy profundo". Me gustó la
frase.
A los pocos días, salió nuevamente en ETB. Creo que estaba en México. Me
llamó la atención oírle decir cómo era posible, a estas alturas del siglo XXI,
en Europa, que se pretendiera juzgar a las personas, políticos en
este caso, por hablar entre ellos. En el siguiente corte apareció José
Luis Bilbao, diputado general vizcaíno, diciendo algo parecido.
"A estas alturas del siglo XXI".
¿Hay que recordarles a ambos dos el porrón de injusticias que están
sucediendo a estas alturas del siglo XXI en Europa? Es grave juzgar al
lehendakari de tres provincias vascas (y a los demás políticos encausados) por
hablar con interlocutores de otras opciones políticas, pero en pleno siglo XXI,
hace pocos días murieron
56 personas intentando entrar en Europa y la noticia ocupó en el periódico
más vendido de Gipuzkoa el mismo espacio que la lesión de pubis del realista David
Vaughan.
El miércoles conocí en Irun a un
joven senegalés llamado Max. Lleva tres años en tierras del
Reino de España intentando ganarse la vida. Desde hace unos meses reside en mi
pueblo. Comparte piso con tres o cuatro personas más y paga 300 euros
mensuales por una mísera habitación… a estas alturas del siglo XXI, en
Europa.
No tenemos vergüenza. Cada cual tenemos nuestra excusa
para seguir sin hacer nada. El reloj ya no hace tic-tac, porque es digital.
A estas alturas del siglo XXI, en Europa. Conviene no olvidarlo.
A comienzos de semana, el Consejo de
Administración del Valencia despidió
a su entrenador, Quique Sánchez Flores. Para la mayor parte de la prensa
deportiva, Quique ha sido cesado.
Estoy suscrito al blog
colectivo Notas de Fútbol. El otro
día, harto ya de que se activará varias veces en mi cuenta de bloglines el
mismo artículo con la información referente a la destitución del
entrenador, les dejé este mensaje:
"Quique Sánchez-Flores ha sido destituido, no cesado. Cesar sólo
puede cesar uno mismo en sus funciones, nadie le puede cesar.
1. intr. Dicho de una cosa: Suspenderse o acabarse.
2. intr. Dejar de desempeñar algún empleo o cargo.
3. intr. Dejar de hacer lo que se está haciendo".
No he conseguido que nadie me responda, pero sí que, por lo menos, hablen de
destitución en el artículo escrito para informar del sustituto,
Ronald Koeman.
Una de estas noches, escuchando
a De la Morena, descubrí que al de Brunete no le cae nada bien el actual
mandamás valencianista. Hablaba del adiós de Quique con un periodista de la
redacción deportiva de la cadena en Valencia. Éste fue capaz de rizar el rizo y
decir que Juan Bautista Soler había cesado autobuses y aviones (o algo
por el estilo).
Mientras escribía esto, me ha venido a la cabeza aquella canción de Veneno:
"No
pido mucho". Descubro, sorprendido, que es de Miquel Martí i
Pol.
No pido mucho:
Poder hablar sin cambiar la voz
Caminar sin muletas
Hacer el amor sin que haya que pedir permiso
Escribir en un papel sin rayas.
O bien si parece
demasiado:
Escribir sin tener que cambiar la voz
Caminar sin rayas
Hablar sin que haya que pedir permiso
hacer el amor sin muletas.
O bien si parece
demasiado:
Hacer el amor sin cambiar la voz
Escribir sin muletas
Caminar sin que haya que pedir permiso
Hablar sin rayas.
El miércoles por la noche nos acercamos a Irun para ver en directo la
presentación del nuevo
disco de Jabier Muguruza. Invitó
como introductor a un músico y poeta veterano: Pablo Guerrero.
Jabier salió a escena para presentar a Pablo (leímos en no pocos sitios que
se apellidaba Herrero: cada vez hacemos las cosas con menos espíritu crítico).
Hombre tranquilo, introvertido, callado, vino acompañado por dos músicos de
postín como son Luis Mendo (Suburbano)
y Nacho Sáenz de Tejada (crítico de música durante años en El
País). Es un referente
para los cantautores españoles y su trabajo merece bastante más caso del que yo
le he hecho hasta el momento. Plata
es su último disco.
También Jabier apareció con sus tradicionales dos cómplices: el guitarrista Ángel
Unzu y la corista Mireia Otzerinjauregi. El trío se
estrenó en el anterior disco y la posterior gira ha hecho que esa experiencia en
común se deje ver fácilmente en el escenario.
El viaje comenzó con la canción que abre Konplizeak, "Dena bukatzean" de Xabier Lete y continuó con
"Norbere akaberari buruzko mintzaldia" escrita por Joseba Sarrionandia.
Cantaron luego "Bizitza bizitza da", la pedazo letra
escrita por Atxaga para el anterior CD. Se
coló a continuación la única canción en castellano del disco: su autora es la
baterista y letrista de Nosoträsh, Covadonga
de Silva. Me encanta cómo te suelta en "No quedan tantas tardes": "No sólo me interesan las personas /
también hay otras cosas en el mundo". En el libreto del disco, está
dedicada a Luz Casal y debe de ser por
esto.
Habitualmente, su madre es quien machaca a Javier con que tiene que tocar
más el acordeón, pero ayer hizo bromas a cuenta de eso porque fue Unzu quien se
lo pidió. Sin desprenderse del acordeón, fue hilando "Maite
zaitut, ez" de Kirmen
Uribe, "Liskar suharra" de Inazio Mujika Iraola
y "Benino edo Benito" (nada más anunciarla, una
mujer detrás de mí dijo "¡ayquebonita!"). Aquí también muy bien Mireia
Otzerinjauregi.
"Antxillesko arkupean" está compuesta tras la
muerte de su padre. Dijo que la letra le salió fácil, pero que no había forma con
la música. Nos explicó que la familia tiene la costumbre de reunirse en el
caserío Antxilles, casa natal de la abuela. Jabier se quedó a solas con su
guitarrista. Duquende pone su voz
rasgada para la intro en el disco.
Con "Irene" han hecho un vídeo-clip donde aparece la
actriz Barbara Goenaga (Nota del 5 de noviembre: me comentan que se me ha olvidado poner el nombre de la letrista, la poeta Leire Bilbao. Tiene razón). Hizo una nueva broma, preguntando al
público que necesitaba saber si había o no bis (fuimos tan así que ni se lo
pedimos a Pablo). Reconoció que podía ser interpretado como ataque de
narcisismo, pero lo que el público hizo mayoritariamente fue reírse. Cerró el
bloque una letra de Iñaki Irazu, "Ertz
maitea", escritor que sólo da a conocer su particular visión de
la vida en los discos de Jabier. Martirio
estaba en Noruega.
El bis fue una vieja canción, letra de Atxaga: "Mazisi
Okeita Denbele". Tras él, la velada se terminó con la doble
aparición en escena de todos los músicos, llamados por el aplauso del público congregado.
"Cuánto trabajo, Jabier, cuánto trabajo" apunté
en mi pequeña libreta. Y talento añado aquí. Y la necesaria cabezonería para tirar hacia delante. Y
más cosas buenas.
Creo que habrá más cómplices el 6 de noviembre en Madrid; el 8 en Donostia; el
9 en Bilbao (ambas dos con Kiko Veneno);
el 16 en Barcelona; el 17 en Zaragoza; el 30 en Zornotza…
Actualización 4 de noviembre: Cuenta hoy Jabier en su colaboración dominical en Noticias de Gipuzkoa cómo flipaban los foráneos en la cena posterior al concierto en una sociedad. Me parece reseñable el apunte.