2007/07/31 13:50:17.800000 GMT+2
Hace un par de semanas acudí al Zoo de Madrid. No me gustó la visita. Muchos de los animales que vi me dieron una pena espantosa. Pero lo que más me llamó la atención del zoológico madrileño no fueron sus animales enclaustrados, sino algo relacionado con el precio de la entrada: 15,90 euros del ala. Si querías saber qué visitar y en qué orden, o simplemente planificar la jornada, se antojaba imprescindible un plano del recinto. Pues bien, el planito costaba otros 50 céntimos. ¿No es de coña?
Y es que a veces, los animales no son precisamente los que están en las jaulas.
Escrito por: Jean.2007/07/31 13:50:17.800000 GMT+2
Etiquetas:
madrid
zoo
| Permalink
| Comentarios (0)
| Referencias (0)
2007/07/30 23:25:42.444000 GMT+2
Cada día me aferro más al dicho Nada es lo que parece. Eso vale también por los libros que Aznar dice que escribe. Me estoy bebiendo un yogur líquido de piña y coco. Eso dice la etiqueta en grandes y coloridas letras. Cierro los ojos y trato de concentrarme en mi sentido del gusto. Le echo imaginación; pongo hasta esfuerzo en ello. Ímpetu, tesón. Pero ni piña, ni coco, ni la madre que los parió. Me pasa con este yogur lo mismo que con Ana Botella, que no doy con su gracia.
Ernesto Sáenz de Buruaga hace muy bien los deberes en Telemadrid. Tiene un programa de esos de debate, feria y milongas varias, en los que se suelen enzarzar a menudo los periodistas adscritos a Prisa y los adscritos al PP. Los rojos contra los azules. Tiene su gracia, pero resulta todo muy previsible. Bueno, y luego está Carmen Gurruchaga, que dice que es periodista, que se engancha con las sombras y los cantos de los espejos. Ah, y con su amiga Isabel San Sebastián. Alguien cuyo nombre no quiero recordar me dijo en cierta ocasión que la Gurruchaga tenía muchos enganchones en las redacciones. Debe ser por ello que sus escritos tienen tantos zurzidos y tantos parches. Pero volvamos a Buruaga, "El Niño del Informativo", "Paquetito de Aznarín", o "Pichi de la Gaviota", que es como la gente con mu mala leshe le suele conocer, digo yo que injustificadamente, dada su pulcritud editorial y profesional (hablando de editoriales, César Vidal es tan egocéntrico, que firma los editoriales de La Linterna, el único programa radiofónico en el que la verdad está siempre a oscuras). Que decía yo, si mi propia afición a divagar no me enmaraña de nuevo, que volvíamos a Buruaga, que le da ahora a las entrevistas cara a cara con personajes de gran calado intelectual. O sea, Ana Botella, porfa. La concejala, la número dos del Ayuntamiento de Madrid, la mano derecha de Gallardón (con perdón, y dicho sea sin malintencionadas pretensiones ni dobles sentidos) le dice, muy sesuda ella, al amigo de su marido, o sea, a Buruaga: "Quiero que el tiempo dure lo más posible". Ea. Y una voz en off sucede a la cita (¿o es citología filosófica?) de la Botella (¿o es de la botella?) con un abrumador: "Ya conoces al pesonaje; ahora vas a conocer a la persona. Coño, apago la tele echando leches. Lo que me hacía falta. Pues eso, como el yogur de piña y coco. Leo el listado de ingredientes. El muy jodío sólo contiene un 1% de piña y de coco. Y es que nada es lo que parece. Bueno, excepto Ana Botella. Ella es tal y como parece. O sea, ni piña, ni coco.
Escrito por: Jean.2007/07/30 23:25:42.444000 GMT+2
Etiquetas:
ana_botella
gallardón
aznar
telemadrid
buruaga
madrid
carmen_gurruchaga
prisa
| Permalink
| Comentarios (1)
| Referencias (0)
2007/07/26 07:38:29.616000 GMT+2
Que la señora Curri Valenzuela dirija un programa de televisión es algo digno de estudio antropológico, sociológico, astrofísico y ergonómico. Que lo presente es, además, cosa de locos, de vodevil, chirimiri catódico y ajuste de cuentas. Que la misma publique un libro, no es más que la dulce constatación de la inmensa bondad del ser humano. Que el libro se venda es sopor irónico, despilfarro preocupante y misterio inescrutable.

Esta señora, que pasa por ser periodista-propagandista, abeja obrera de las letras y cocinera de recetas aznarescas, tiene en el mercado un panfleto de inigualable bajeza intelectual. Ni Ana Botella hubiera logrado recopilar tanta telaraña literaria. El engendro lleva por título 100 personajes que hunden España. El desahogo le habrá servido a la reaccionaria estrella mediática de la televisión de Espe Aguirre para dar rienda suelta a sus fobias y, de paso, para ganar más puntos en la ruleta de la fortuna de los medios de incomunicación controlados por el PP. Curri es Encarna, pero Encarna no quiere ser Curri. Nombre tan bonito y religioso no es del gusto de Curri, que prefiere esa guinda chupiguay, como de café en el club de campo o en la cafetería Mallorca. Curri, que no encarna el buen periodismo, ha montado el pollo. Pollo con Curri. Curri se ha quedado con esa sutil elección nominal a las puertas de lo bajo, de lo vulgar. Entre Curri y Currito sólo hay una sílaba "de distancia", de diferencia, pero es lo justo para salvarte de lo chusmeril.
La lista de Curri no tiene desperdicio; éste se lo ha llevado todo la calidad del aborto literario en cuestión. En la lista aparecen Zapatero, Sonsoles, Caldera, Rubalcaba, Rodríguez Ibarra y Carmen Calvo. Es cosa comprensible y previsible conociendo a la autora. Que figuren también Polanco, Rubianes, Almodóvar, Regàs, Sabina y Pilar Bardem, pues es hasta lógico. Uno en el periodismo militante se está examinando cada día. Esto es parecido a lo del carné por puntos: si no haces reír a papito, te quedas sin el pase. Y ya se sabe: el que tiene pase pasa, y el que no, no pasa. Curri tiene pase vip... y nombre de salsa. Entre los 100 personajes que hunden España según la incorruptible periodista (que también tiene un aire así como de Pilar Urbano) aparecen también Hugo Chávez, las camisetas del ché, el bautizo civil, los adictos al móvil... De coña, vamos. Será cosa de terapia. "Hola, soy Curri Valenzuela y soy reaccionaria". "Gracias, Curri. Bienvenida a reaccionarios anónimos. Siéntate. Oye, ¿Curri es como la salsa?, ¿como el pollo al...?"
Pero la profundidad gnoseológica de la obra de Curri no acaba ahí. También aparecen en la relación, en los 100 principales de Curriwoman: anoréxicas y bulímicas, Latin Kings y otras bandas, los del botellón, los anti-Federico... ¡y los asaltapiscinas! (¿Tendrá algo que ver que Curri escriba de cuando en cuando en el peródico de Pedro J., sufridor de los "asaltapiscinas"?). Delirio dogmátgico alcanza Curri en sus páginas dedicadas al bautizo civil y a los antiamericanos. Aunque yo me quedo con una cita para la eternidad: "Que Manolo Escobar ya no cante 'Que viva España' prueba cómo está el país".
Curri asegura que no sabe decir las cosas a medias, pero la verdad es que ya se quedó a medias en el título, una especie de coitus interruptus. Para lograr el orgasmo literario (con el otro, allá ella se las componga como quiera) debería haber sido más leal a su vehemencia y militancia y haber optado por un título como Los 100 españoles a los que no trago.
Lo peor es que la bobería ha tenido tanto éxito, que Curri ya amenaza: "Cuando el PP vuelva, prometo que haré una nueva edición". Anda que no se le ve el plumero a Curri. Eso sí, el Premio Príncipe de Asturias de Comunicación aguarda... salvo que decidan dárselo a El Jueves.
La lista de Curri:
1. Zapatero
2. Pedro Almodóvar
3. Irati Aranzabal
4. Jorge Javier Vázquez
5. Pilar Bardem
6. Josep-Lluís Carod-Rovira
7. Jesús Eguiguren
8. Juan Antonio Roca
9. Cándido Conde-Pumpido
10. Chaves y sus hermanos
11. Iñaki de Juana Chaos
12. Polanco
13. El facha
14. Txeroki
15. Mercedes Milá
16. Pepe Rubianes
17. Los antiamericanos
18. Rosa Regás
19. Arnaldo Otegui
20. José Blanco
21. El turista sexual
22. Los organizadores del 13-M
23. El imán de Fuengirola
24. Juan José Ibarretxe
25. Latin Kings y otras bandas
26. Federico Luppi y los otros titiriteros
27. El maltratador
28. Inma Mayol
29. Josu Ternera
30. Alfredo Pérez Rubalcaba
31. El CAC
32. Las Nekanes
33. Hugo Chávez
34. Suso de Toro
25. Sonsoles Espinosa
36. Carlos López Aguilar
37. Elena Salgado
38. Alberto Cortina y Alberto Alcocer
39. Jesús Caldera
40. Francisco Muñoz
41. Sabina
42. Santiago Carrillo
43. Las feministas de cuota
44. Rafael Vera
45. Farruquito
46. Magdalena Álvarez
47. Gran Wyoming
48. Francisco Javier García Gaztelu
49. Diego López Garrido
50. Los amantes de las conspiraciones
51. Gaspar Zarrías
52. Federico Mayor Zaragoza
53. Los del botellón
54. Pedro Torrejón y Joaquín Tejeiro
55. José Emilio Rodríguez Menéndez
56. Los bestias del fútbol
57. Joan Saura
58. María Antonio Trujillo
59. José Montilla
60. María Patiño
61. Los adictos al móvil
62. Los asaltapiscinas
63. Miguel Herrero
64. Los del Río
65. Luis Solana
66. Las que ligan para ascender
67. María José Campanario
68. Juan Carlos Rodríguez Ibarra
69. Los compradores de inventos innecesarios
70. Isabel García Marcos
71. José María García
72. Los albanokosovares
73. David Beckham
74. Gregorio Peces-Barba
75. Manolo Escobar
76. El bautizo civil
77. Julián Muñoz
78. Las camisetas del Che
79. Jaime Peñafiel
80. Los mentirosos del 11-M
81. Cristina Narbona
82. Luis Aragonés
83. El hermano del político
84. Mariano Fernández Bermejo
85. Bea la Fea
86. Teddy Bautista
87. Alfonso Guerra
88. Francisco Hernando, el Pocero
89. Los atronadores
90. Carmen Calvo
91. Risto Mejide
92. Juan Rodríguez Lozano
93. Anoréxicas y bulímicas
94. Horatio Caine
95. Los anti-Federico
96. Jaime de Marichalar
97. Baltasar Garzón
98. El polígrafo
99. Santiago Mainar
100. Los hombres de negro
Escrito por: Jean.2007/07/26 07:38:29.616000 GMT+2
Etiquetas:
periodismo
pp
sabina
ana_botella
esperanza_aguirre
rubalcaba
predro_j
hugo_chávez
zapatero
telemadrid
almodóvar
manolo_escobar
curri_valenzuela
| Permalink
| Comentarios (7)
| Referencias (0)
2007/07/04 09:13:40.629000 GMT+2
Acababa de entrar a una tienda de esas en las que puedes encontrar casi de todo a un precio inigualable. Uno suele decir "voy al chino", de una forma un tanto estúpida. El caso es que cuando acudo a la panadería no digo "voy al conquense" o "voy al español". Es igual, el caso es que estaba buscando un artículo cuando un tipo chaparrete, moreno y un tanto redondito le ha espetado a la dependienta de la tienda, una joven de no más de dieciocho años: "Sales y me atiendes, que los chinos sois unos putos vagos. La mierda los chinos, que estáis invadiendo Ecuador. Mierda de chinos".
Me he contenido para no mandarle muy lejos. En un cuerpo a cuerpo yo tenía todas las de ganar, pero cada vez me cuesta más enredarme en conflictos que no llevan a ninguna parte, si acaso a una comisaría o al hospital. He deducido que el capullo sin fronteras, el chulapón aguerrido, el caballerete que se ha ido mascando insultos y catalogando a 1.300 millones de seres humanos de un salivazo, es de Ecuador, ese país que está nutriendo mi barrio, mi calle y mi bloque con miles de personas que huyen de la pobreza y de la falta de oportunidades, buscando refugio en un país en el que han encontrado la posibilidad de vivir en mejores condiciones, trabajar y enviar dinero a su familia.
Hace unas semanas, volando a Alemania, entablé conversación con un hombre que había estado trabajando allí 35 años. Me dijo: "Los alemanes siempre nos miraron mal. Nos trataron exactamente igual que tratamos nosotros ahora a los chacanitos estos que llegan a España". La frase lo dice todo. El tipo chaparrete de Ecuador dibujó con sus exabruptos el mapa de la agresividad de los seres humanos. Parece mentira, pero desde Altamira hasta aquí la cosa ha cambiado muy poco. Y encima, antes dibujaban mejor.
Ah, la joven china no se estuvo callada y le soltó un nítido y contundente "Vete la mielda, cablón". Creo que cuando acuda a esa tienda no vólveré a decir que voy al chino. ¿Acaso hay algo más español que esa dulce manera de despedir a alguien?
Escrito por: Jean.2007/07/04 09:13:40.629000 GMT+2
Etiquetas:
inmigración
china
ecuador
alemania
altamira
| Permalink
| Comentarios (0)
| Referencias (0)
2007/06/30 14:06:9.431000 GMT+2
Esperanza Aguirre y sus malabaristas del voto se han hartado de inaugurar estaciones de Metro en los días previos a las Elecciones Autonómicas. Si les dejan, inauguran de nuevo el Palacio de Oriente. Probablemente, el Metro de Madrid ha sido la principal medalla que se ha colgado la insaciable presidenta de la Comunidad de Madrid. Su línea en este campo ha ido más allá del continuismo. Ruiz-Gallardón comenzó una expansión desenfrenada. Al rico metro de Metro, oiga. La charlatanería produce los mismos réditos que el caciqusimo. Antes Gallardón y ahora Aguirre se han dado cuenta de la importancia de sacarle brillo al Abono Transportes. Y visto el resultado, habrá que asentir y reconocer que acertaron. Han ganado de calle.
Lo curioso es que tengo la sensación de que quienes más valoran el faraonismo jondo de los populares son precisamente aquellos que no se suben al Metro ni jartos de vino. Baso esta teoría en una praxis maldita, en una peregrinación diaria por los vagones del rancio olor a chispa, a mecha encendida, a jugo añejo, a rancio abolengo de los amos del secano. Alcanzo esta teoría, después de sufrir los retrasos, después de ser desalojado un día sí y otro también de esos vagones en los que se producen orgías diarias de roces, lametones, pisotones, caricias, codazos, miradas dessafiantes, descafeinadas y otras sutiles variantes del Kamasutra.
No somos pasajeros ni viajeros, somos autómatas, robots, números, abonados, votos, berberechos, sardinillas, cualquier especie que se aloje en conserva, que sea modelable y moldeable. Somos esponjas andantes, ceniza que se descuelga del habano de cualquier consejero o concejal de turno, que ni ha pisado ni pisará el Metro salvo por exhortación de su mandamás en época de puterío electoral.
Tornos que no funcionan, escaleras mecánicas que agonizan sin la atención del mantenimiento mínimamente exigible, aires acondicionados ausentes, paradas intermitentes insistentes, desesperantes, indignantes, recurrentes, sin explicación ni más lógica que la propia ilógica de un servicio que se presta sin los medios necesarios.
Ahora, en las nuevas estaciones es habitual comprobar la presencia de guardas de seguridad y notar la ausencia de los tradicionales empleados de Metro. Ya no hay taquillas; en su lugar han florecido máquinas que se rebelan, adoctrinadas como un HAL cualquiera, en época de jodiendas y largas esperas. Cuando uno las necesita sacan a relucir el clásico "No disponible". Si Larra levantara la cabeza- dejando al margen que es muy probable que se la volviera a volar- les dedicaría su magistral "Vuelva usted mañana". ¡Y qué remedio nos queda a los cientos de miles de pacientes, que no viajeros, a nosotros, doloridos, renqueantes y humillados viajeros de Metro!
Ascensores parados, estaciones en obras, todo a medias, porque se dieron tanta prisa que ahora es cuando llega el momento de ponerle cremallera al pantalón. Ayer mismo entré en una de esas supuestamente flamantes nuevas estaciones y contemplé indignado que las averías salpicaban su entrada. Las escaleras mecánicas de bajada languidecían mientras unos operarios estaban encaramados en un andamio dando brochazos a los cuatro vientos, a una altura considerable, sin casco ni protección alguna. Una vez dentro, más andamios y currantes jugándose el tipo y pasándose por el forro de los mismísimos cualquier mínima aplicación del sentido común, que suele ser ese ángel de la guarda de andar por casa. Todo un despropósito, toda una indecendia, pero una realidad colosal, destemplada y choricera. Y ahora, veranito, veranito, reducción de trenes para levantarte más tempranito.
Algunas mañanas, mientras alguien me obsequia con una halitosis de otra galaxia (que en ésta esas cosas no pueden ser ni medio posibles), y me clavan un tacón de aguja en el hígado, intento leer un libro, pero no hay narices a pasar de página sin provocar un cataclismo en el vagón. Algunas mañanas, me imagino torturando a Esperanza Aguirre y a Gallardón; me veo aplicándoles un castigo temible e inhumano. Algunas noches sueño con esa misma idea, se repite esa cruel tortura una y otra vez. Pero en el fondo sé que no es más que un deseo tan morador del subconsciente como del consciente febril. La vana ilusión se despeja, se disuelve, se evapora, salta hecha añicos, se esparce como las cenizas del desconsuelo y del eterno adiós.
Algunas mañanas me gustaría ver hecha realidad esa tortura, o sea, verles viajar en Metro.
Escrito por: Jean.2007/06/30 14:06:9.431000 GMT+2
Etiquetas:
pp
metro
esperanza_aguirre
madrid
larra
ruiz_gallardón
kamasutra
elecciones
| Permalink
| Comentarios (0)
| Referencias (0)
2007/06/18 22:00:29.480000 GMT+2
Comprendo la tirria que despierta y alimenta el Real Madrid. En su época gloriosa, fue utilizado por Franco. El club se dejaba querer. Y qué remedio, digo yo. O por las buenas, o a hostias. Mussolini en Italia hacía tres cuartos de lo mismo, sacándole jugo a las victorias italianas en un Mundial de pufos y controversias arbitrales ; Hitler en Berlín, también, aunque amargado por los éxitos de un atleta negro llamado Jesse Owens. No es una etiqueta exclusiva del Madrid. Y ahora, o sea, hoy, transición mediante, buena parte de los representantes de los poderes fácticos se disputan una plaza en el palco del Santiago Bernabéu. Algunos de sus últimos presidentes han contado incluso con el apoyo del sector pepero y de destacados y reputados empresarios. Desde el Defensor del Pueblo hasta Felipe González (para que luego digan que el PSOE es la izquierda, juas, juas..., ), pasando por Desesperanza Aguirre, la chiquillería de la politiquería y del forofismo demagógico pierde el culo por salir en la foto de los campeones.
La prepotencia impulsiva de Florentino Pérez, el Darth Vader de las constructoras y auténtico estilete de los amos del cotarro, regó en las plantaciones de iras de las aficiones rivales y las hizo crecer de forma milagrosa. Esa inservible prepotencia ha terminado por convertir al club merengue en el objetivo a batir y derribar. Nunca había despertado tanto odio y animadversión en sus desplazamientos. Tanto galáctico y tanta ensoberbecida vanidad han pasado factura a un club al que se le llena la boca cada vez que habla de imagen de marca.
Esta Liga se ha caracterizado por la irregularidad, curiosa paradoja en el torneo de la regularidad. Ni el Sevilla, que se ha desinflado justo cuando los equipos tienen que demostrar sin son o no grandes; ni el Barça, diluido en guerras de egos, incomprensibles migrañas de su cupula directiva y deportiva; ni el Madrid, sufriendo en silencio a su presidente y a su rácano entrenador han maravillado a ningún aficionado al fútbol. Digo, quede claro, a ningún aficionado al fútbol, una especie en extinción. Lo que abunda es el forofo, más pendiente de que el equipo de sus amores gane al precio que sea, o de que su "eterno rival" pierda y salga quemado y humillado en toda índole de envites.
Ésta fue la Liga de las inconsistencias, de los errores insistentes, de la paletada y estupidez de Lopera y del Betis con el bochonorso espectáculo de la Copa. Ha sido un campeonato apasionantemente discreto, emocionante al final, apoyando esa emoción en el errático destino de equipos que parecían no querer levantar la Copa de campeones. El palmarés engulle el nombre del Real Madrid, pero dice mucho que el que más ha hecho para que los blancos sumen su trigésimo título liguero haya sido Raúl Tamudo, un periquito al que unos cuantos cachondos quieren beatificar.
El Madrid tiene estas cosas; es campeón a pesar de un presidente bocazas, figurón e impulsivo, un tipo que no sabe actuar en situaciones críticas. Es campeón pese a un entrenador italiano bañado en éxito, pero que aburre a las ovejas y destiñe los teoremas del buen gusto futbolístico. En Italia ganar no es lo más importante; es lo único. En el Bernabéu, hasta ahora, no. Hay una necesidad plástica, de retórica, de expresión, de fantasía. Ha llegado el momento de decidir si se quiere seguir así o si, por el contrario, es preferible rasgar el cuadro, quemar los libros sagrados del madridismo y renovar a Capello.
Escrito por: Jean.2007/06/18 22:00:29.480000 GMT+2
Etiquetas:
ramón_calderón
liga
sevilla
barça
tamudo
real_madrid
bernabéu
fútbol
capello
| Permalink
| Comentarios (2)
| Referencias (0)
2007/06/03 15:08:49.305000 GMT+2
No puede ser... pero es. Está uno un par de meses de náufrago sedentario, de rascanalgueo compulsivo y misiones pecuniarias, y hala, aquí pasa de todo. Aguirre y Gallardón se reparten el botín de la clase media madrileña, sadomaso de las hipotecas, de los parquímetros y del faraonismo emprendedor. Tamayo y Sáez ya son historia. Cómo echo de menos aquella gran cita épica: "Que no, a todo que no". Define, sin duda, el talante y el rigor intelectual y ético de la charanga festivalera en que han convertido unos y otros el patio político patrio, o PPP, que suena más cuco. Con una P menos, los liberales se relamen y envían a sus jóvenes castores de compras al París de las luces. Y todo, para darle claroscuros al pueblo, tiene guasa. Van a aprender de Sarkozy. O mejor dicho, de sus métodos, muy efectivos en los suburbios de la capital francesa y muy populares entre los jóvenes parados. No sé si, ya de paso, tomarán apuntes de Le Pen, quién sabe.
La verdad es que la lectura de estas elecciones ya se me queda pelín antigua. Me gusta lo que ha dicho Soraya Sáenz de Santamaría: "Los españoles han dejado claro que no les gusta la forma de hacer política de Zapatero". Gilipollez colosal, oiga. ¿De dónde sacan a estas promesas hechas realidad en un abrir y cerrar de ojos? ¿Qué españoles han dejado eso claro, los buenos, los chupiguays, los que "nos" votan?
En fin, que en estos últimos días, he experimentado una nueva sensación, sin leer la prensa, sin ver la televisión y sin pasearme por la calle Génova en la noche de autos. Me estoy haciendo mayor, se me están quitando las ganas de tocar las narices. Vamos, que me estoy aburguesando. Coño, que si no fuera por la existencia de Aznar, igual hasta apagaba y me iba. Pero me da tanta vidilla este pequeño saltamontes. Qué simpático, ahora con otros inversores, de asesor multiestelar, de funambulista de las bolsas y los fondos de riesgo. Ya me lo imagino dentro de unos años ejerciendo de abuelo batallitas con sus nietecitos. Lo que me pregunto es qué batallas les contará. ¿Les describirá sus hazañas liberales junto a Murdoch y Centaurus? ¿Optará quizá por rememorar sus parodias en Georgetown? ¿Recordará sus paseos por la enología riojana? ¿O quizá les contará las 30 diferentes maneras violentas de morir los niños iraquíes en una guerra en la que supuestamente se buscaban unas armas de destrucción masiva que sólo estaban en la mente de algunos abuelos ignorantes sin escrúpulos?
Escrito por: Jean.2007/06/03 15:08:49.305000 GMT+2
Etiquetas:
irak
pp
georgetown
aguirre
gallardón
aznar
sarkozy
guerra
zapatero
le_pen
liberalismo
centaurus
murdoch
| Permalink
| Comentarios (3)
| Referencias (0)
2007/06/02 13:01:5.447000 GMT+2
Algo más viejo, notablemente más cansado y quizá menos incisivo y menos cascarrabias, retorno a la actividad bloguera, después de que el maldito disco duro de mi portátil decidiera pasar a mejor vida, dejándome más solo que la una. La verdad es que últimmente apenas si tengo tiempo para cabrearme, y eso, en sí mismo, ya me cabrea, por aquéllo de no perder las costumbres. A ver si poco a poco encuentro algún rato para traer a mi blog a personajes entrañables. En la medida de lo posible, trataré de centrarme en mis ídolos: Aznar, Aguirre, Zaplana, Bono y Lomana S.L, Vidal, Losantos, pero, la verdad, últimamente no les hago ni puñetero caso. Y no vean cómo he ganado en salud mental. Aunque, también es cierto, no me gusta ni un pelo eso de "Ojos que no ven, corazón que no siente". Después de unos meses a ciegas, ya va siendo hora de abrir los ojos.
Escrito por: Jean.2007/06/02 13:01:5.447000 GMT+2
Etiquetas:
| Permalink
| Comentarios (5)
| Referencias (0)
2007/03/23 19:29:46.375000 GMT+1
Algo falla en el metro de Madrid. Desde los altavoces del PP se dispara y dispersa a los cuatro vientos la teoría del sabotaje. De momento, no han dicho nada de Otegi ni de los actores pancarteros, pero no se descarta que echen mano de ello llegado el momento. Ya puestos, entre sabotaje y conspiración… En breve, podemos pasar de ver esas pancartillas en cartón, coloreadas con el rojo y el gualda y que muestran el texto “11-M. Zapatero: queremos saber” a otras preguntándole al presidente del Gobierno por el desaguisado permanente que se vive en el metro.
No hay día que no escuchemos esa voz burócrata y asexual que anuncia una avería. Todos los días. Y si nos diera por contar las escaleras mecánicas y los tornos que no funcionan... O si detallásemos nuestros paseos por esas estaciones recién restauradas que presentan goteras y desperfectos a los pocos días de su remodelación.
Lo que está pasando en el metro de Madrid es una vergüenza que pone de manifiesto que los políticos prefieren sacar provecho y tajada de la verbena o maratón de inauguraciones express antes que garantizar el correcto funcionamiento de toda la red. Lo que se constata es que ni Gallardón ni Esperanza Aguirre viajan en Metro. Eso está claro. Seguro que si lo hicieran podrían tomar nota de la paupérrima situación que vive este medio de transporte por el que circulan cientos de miles de madrileños cada día. ¿Cuánto se destina al mantenimiento de las instalaciones y los trenes? Me temo que nada en comparación con esas estúpidas campañas publicitarias que se encargan de presentar al alcalde y a la presidenta de la Comunidad como si fueran los arquitectos del universo y los creadores cosmogónicos.
Desgraciadamente, entre la mayoría de los madrileños cunden la resignación y la contemplación sin crítica. Los libros u hojas de reclamaciones parecen no existir en esta sociedad en la que reinan las prisas. Nos quejamos poco. Muy poco, para lo caro que nos cuesta cada metro de los que recorren Aguirre y Gallardón escoltados en coches de lujo y sin detenerse ante los semáforos. Los dos deberían llevar un libro de reclamaciones cosido a la espalda. Y por cada queja argumentada deberían cumplir una condena abomimable: ir un día al trabajo en metro.
Escrito por: Jean.2007/03/23 19:29:46.375000 GMT+1
Etiquetas:
pp
metro
aguirre
gallardón
otegi
11-m
zapatero
| Permalink
| Comentarios (10)
| Referencias (0)
2007/03/20 22:16:2.411000 GMT+1
Resulta complicado encontrar en la prensa mundial sandeces más logradas y meritorias que las de José María Aznar. Son todas de recopilatorio. Todas para archivar y leer a los nietos el día de mañana, si es que nos dejan tener día de mañana.
El modelo de nuestra sociedad queda perfectamente reflejado en el ascenso y progreso político y económico del mediocre Aznar. Es el paradigma del personaje gris, intelectualmente marchitado y de discurso simplista y hueco. De su aspecto es mejor no hablar; sería partir con ventaja, y en parte –sólo en parte- él no tiene culpa. Aunque tampoco sería decabellada una interpretación menos decorosa de este remake de Dorian Gray.
Los sesudos análisis del pequeño ruiseñor del PP, recompensados a precio de oro, nos dejan frases para la posteridad tales como: “"Mi experiencia es que es imposible dialogar con el terrorismo, y que la única forma es luchar y derrotarlo".
Más allá de la renqueante, vacilante y zigzagueante sintaxis de sus arengas, está el contenido, el fondo, el mensaje en sí mismo, igualmente tambaleante.
El principal problema de Aznar es que en su autoproclamada divinización y ascenso al Olimpo liberal ni siquiera ha encontrado una estación, un hueco, una reflexión para calibrar de forma reposada qué es eso del terrorismo. Porque somos miles los ciudadanos del mundo que tenemos la nítida percepción de que los mayores terroristas del mundo son algunos de los que un buen día se hicieron una foto y decidieron la invasión de un país, cuyas consecuencias se traducen en millones de afectados, muerte, dolor. Si damos por válido que, entre otras cosas, el terrorismo es la dominación por el terror o la sucesión de actos de violencia ejecutados para infundir terror, José María Aznar debería replantearse sus amistades, sus acciones, sus decisiones y sus palabras. Pero eso quizá no esté ya a su alcance. No ya en un hombre que ha perdido la noción de lo que es el terrorismo.
Escrito por: Jean.2007/03/20 22:16:2.411000 GMT+1
Etiquetas:
irak
terrorismo
aznar
| Permalink
| Comentarios (2)
| Referencias (0)
Siguientes entradas
Entradas anteriores