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2003/11/09 06:00:00 GMT+1

Las citas de Sabino Arana

Desde hace unos días, El Mundo incluye a diario en el frontispicio de su portada una cita de Sabino de Arana Goiri, fundador del Partido Nacionalista Vasco.

La inclusión de esa serie de citas, en realidad bastante poco acorde con la intención inspiradora de la mini-sección -en principio se decidió recoger en ese espacio frases, sentencias y aforismos de carácter positivo, que animaran a los lectores a la reflexión, no al enconamiento-, persigue el obvio fin de desprestigiar la doctrina sabiniana, cosa que, al parecer, los autores de la idea consideran especialmente pertinente ahora, cuando el Gobierno autónomo trata de impulsar su plan soberanista.

Parten, para empezar, del criterio de que la doctrina sabiniana goza de un elevado predicamento dentro del mundo nacionalista vasco. Lo cual es incierto.

La inmensa mayoría de los nacionalistas vascos sabe de sobra que Arana Goiri defendió posiciones abiertamente racistas y exclusivistas, y no les guarda ningún aprecio.

Lo que rescatan los actuales nacionalistas vascos de la trayectoria de Arana no es su muy tosca y cateta formulación del ideario euskotarra, sino el impulso práctico que dio a la conversión de la difusa rebeldía nacional de muchos vascos de finales del siglo XIX en un movimiento político organizado.

Los postulados doctrinales de Arana fueron muy pronto puestos en cuestión, incluso por él mismo, hombre de notable inestabilidad ideológica. Lo que siguió adelante y cobró fuerza, en cambio, fue su transformación del viejo foralismo en un potente catalizador de las energías destinadas a eso que ahora se llama -a mi juicio con escaso tino- «la construcción nacional de Euskal Herria».

En contra de lo que tal vez imaginen los promotores de este compendio de citas, el recuerdo de las ideas disparatadas de Arana Goiri no provoca ninguna desazón en los nacionalistas vascos, que las conocen de sobra, y las desaprueban. Lo que sí puede es elevar todavía más el grado de hostilidad que amplios sectores de la población española sienten hacia el nacionalismo vasco, en particular, y ya para estas alturas, contra los vascos, en general.

Puede elevar la virulencia de esa hostilidad, sí, y -lo que es peor- hacerlo con trampa. Porque no sólo no ilustra al lector poco versado sobre el hecho de que la mayoría de los nacionalistas vascos están al margen de tan primitivo e irracional ideario, sino que tampoco le hace saber que somos bastantes los vascos que, muy alejados de la órbita del PNV, venimos defendiendo desde hace décadas el derecho a la autodeterminación de nuestro pueblo no sólo al margen del ideario sabiniano, sino incluso en contra de él.

Este modo de citar tampoco previene al lector ante el hecho de que en la literatura, política y no política, de los inicios del siglo pasado -por no remontarse en el tiempo- era facilísimo toparse con formulaciones racistas, xenófobas, machistas, clasistas y hasta descaradamente inciviles y violentas.

Incluso en autores que hoy son considerados muy estimables.

Pío Baroja, radicalmente hostil al nacionalismo vasco, escribió, bastante después que Arana, los artículos que fueron compendiados en Comunistas, judíos y demás ralea, antología de disparates racistas, reaccionarios y antisemitas que hizo las delicias de los falangistas españoles. Otro vasco anti-nacionalista, el españolísimo Miguel de Unanumo -quien, por cierto, tenía un elevado concepto de Sabino Arana, lo que dice bastante... de ambos-, perpetró páginas xenófobas de grueso calibre. Llegó a pretender que los catalanes son «como sus edificios: todo fachada», desvarío muy del estilo del que condujo al magnífico gallego y galleguista Curros Enríquez a compararnos a los vascos con nuestras montañas, para «demostrar» que en realidad parecemos mucho, pero somos poca cosa. Ni qué decir tiene los sustos que podría procurar a más de uno la consideración ideológico-política de la obra de José Ortega y Gasset, al que no pocos consideran no ya el mejor, sino el único filósofo español del siglo XX digno de estima.

No quiero ni pensar lo que podría dar de sí una antología de las letras hispanas que tomara como sujeto -y objeto- la etnia gitana. Habría que reservar un espacio en el oprobio colectivo incluso para personas tan «buenas, en el buen sentido de la palabra» como don Antonio Machado, que hasta en verso dejó constancia de las debilidades de su sentido de la hermandad universal.

De Cervantes a Santa Teresa, pasando por Tirso y Calderón. Y, a escala internacional, desde Shakespeare a Lincoln, pasando por Napoleón y Bakunin. El que no tenía entre ceja y ceja a los judíos, tenía a los moros, o a los negros. ¿Lincoln a los negros? Ay, sí, hijos míos: don Abraham siempre pensó que lo mejor era devolverlos a África y quitárselos de enmedio.

Nada más alejado de mi intención que comparar las reales o supuestas excelencias literarias de estas y otras prestigiosas firmas con la prosa de Sabino Arana, inasequible a la admiración, se tome por donde se tome. Pero admítaseme que, si de descalificarla por su incorrección política se trata, habría que ponerla en la abundante compañía histórica que se merece.

No sé, en suma, qué de inteligente y de benéfico puede tener, a la hora de considerar el proyecto de reforma del Estatuto presentado por el Gobierno vasco, meter en danza los delirios de grandeza bizkaitarra de Sabino de Arana-Goiri. Porque el proyecto de Ibarretxe -más o menos acertado en esto o en lo otro: discutible por propia definición- no se basa en ninguna pretensión de superioridad de los vascos, sino en una modesta reivindicación de igualdad.

«Decidan ustedes sobre su vida en paz; dejen que nosotros decidamos en paz sobre la nuestra. Y, a partir de ahí, de ese respeto mutuo, veamos en qué podemos ponernos de acuerdo para ayudarnos y colaborar en todo lo que a todos nos convenga».

Si ése es un mensaje sabiniano, que venga Jaungoikoa y lo vea.

Javier Ortiz. Apuntes del natural (9 de noviembre de 2003). Subido a "Desde Jamaica" el 29 de octubre de 2017.

Escrito por: ortiz el jamaiquino.2003/11/09 06:00:00 GMT+1
Etiquetas: 2003 sabino_arana apuntes pnv | Permalink | Comentarios (0) | Referencias (0)

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