Pedradas

Euskaraz

Hacía tiempo que tenía ganas de ir a la sala Atabal de Biarritz y fue anteayer cuando cumplí mi deseo. La excusa era el concierto del jamaicano U-Roy.

Situada cerca de la Estación de trenes de Biarritz, no resulta complicado conseguir aparcamiento cerca y, además, la sala de conciertos es magnífica (con aforo para 700 personas). La única pega que le veo es que el escenario queda un tanto bajo, lo cual es un problema con las generaciones-jirafa actuales. En el mismo recinto hay una larga barra de bar, salas de ensayo y grabación, espacio multimedia, etc.

En Iparralde la afición al reggae tiene más tradición que a este otro lado y la mayoría de los grandes nombres del género pasan por allí. A pesar de todo, nuestras perspectivas eran pesimistas. Menos mal que no se cumplieron y el lugar rozaba el lleno cuando nosotros llegamos.

La labor de telonero le tocó a un ya talludito Junior Marvin, el cual le dejó en su punto el público al maestro. A la banda que estaba desde el comienzo (vientos, guitarra, bajo, batería, teclados), se le unieron dos mujeres en los coros. U-Roy apareció en escena con traje plateado y sombrero que le daban un toque elegante. Disfrutamos con su voz y su música durante, aproximadamente, una hora.

Hoy, sábado, los jamaicanos estarán en la sala Santana 27 de Bilbao. Por cierto, el precio de la entrada en la taquilla de Biarritz era de 16 euros el día del concierto; hoy, en Bilbao, cuesta 21 euros. La sala del jueves tenía capacidad para 700 espectadores; la de Bilbao, por su parte, permite el acceso a 2000 personas. ¿A qué se debe esa diferencia de precio? No lo entiendo muy bien.