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2007/05/28 00:50:00 GMT+2

El voto aristocrático

Mi amigo Manuel –hoy no toca hablar de Gervasio Guzmán– me dijo hace años que me tomo mi voto demasiado en serio.

Ayer, según meditaba profundamente mientras paraba mis posaderas en el inodoro –lugar que incita como pocos a la reflexión teórica–, llegué a la conclusión de que es muy posible que tenga razón. Me he pasado años diciéndome: «Ten cuidado con el voto, no sea que luego te tengas que reprochar que un sinvergüenza esté haciendo sinvergonzadas gracias a tu apoyo». Pero, ¿a qué ponerse tan solemne? Montones de las barrabasadas que suceden se producen gracias a nuestro apoyo involuntario. Por ejemplo, todas las que se financian a cargo de los impuestos que pagamos (que yo, por lo menos, pago).

Cabe concebir el voto como una decisión de hondísima importancia, que compromete moralmente por cuatro años, pero también cabe tomárselo como un papel de usar y tirar, que vale para el momento y ya está; para fastidiar un poquitín al uno o dar un mínimo empujoncito al otro.

Si uno se lo toma del primer modo, como yo vengo haciéndolo desde hace 30 años, resulta casi inevitable hacerse abstencionista.

He votado en ocasiones contadísimas. Lo he hecho en algunos referendos, pensando que un «sí» o un «no» resultan complicados de manipular. También voté a Julio Anguita en las elecciones de 1996 –me parece recordar que fue en ésas– con la explícita intención de ayudar al desalojo de Felipe González. Y porque él, en persona –no el PCE, no IU, en general–, me merece confianza. Voté también a Txema Montero en las europeas de 1987, y no me arrepiento: lo considero un hombre sensato, al que le importan los criterios éticos, y no me ha defraudado.

En todas las demás ocasiones, me he abstenido.

Mi reflexión actual es ésa: ¿en qué medida mi abstención recalcitrante no es fruto de un aristocraticismo político arrogante y absurdo?

Vale: Dixi et salvavi animam meam. Pero, ¿y qué se gana salvando el alma? O, mejor dicho: ¿se salva el alma de ese modo?

No os voy a contar qué hice finalmente ayer. (Es más: escribí esto antes de decidirme.)

Lo he escrito porque me parece que puede animaros a pensar.

No pretendo otra cosa con lo que escribo: ayudarme a pensar a mí mismo y, ya de paso, si alguien me acompaña…

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Post Scriptum

 Escribí el texto antecedente ayer por la tarde, como he dejado dicho, cuando aún no tenía ni idea de los resultados electorales.

No le he cambiado ni una tilde. Este añadido lo escribo después de oír las estimaciones de los votos efectivamente emitidos, tras la medianoche.

Señalo lo que me parece más obvio.

El PSOE ha perdido abrumadoramente la batalla de Madrid. Son las cifras de Madrid las que marcan el cómputo general y dan la nota en el conjunto «nacional».

En realidad, la de Madrid es la única batalla importante que ha perdido el PSOE.

En mi criterio, en Madrid se han conjugado dos elementos coincidentes: las candidaturas del PP han funcionado relativamente bien, conforme a lo previsto, y las del PSOE no han funcionado en absoluto, también conforme a lo previsto. Es preocupante lo mal que Zapatero ha gestionado el frente de Madrid. Ni Sebastián ni Simancas tienen el punch necesario para combatir en un ring tan importante como ése.

Pero el asunto tiene su intríngulis: el fracaso de Madrid es importante, pero es un solo fracaso.

La otra cara de la moneda es también importante: después del enorme desgaste que ha hecho, el PP (Rajoy) no ha avanzado casi nada.

Quitando ese aspecto, que es el más llamativo, hay otros que habrá que ir desgranando en los días venideros. A saber: la abstención, creciente;  los cambios (que ya se verán si se producen, y cómo) en Nafarroa, Ses Illes, Canarias, capitales gallegas, Logroño; la bofetada de Eusko Alkartasuna; el descenso del PNV en Gipuzkoa y Araba; la papeleta que tiene ahora el PSE-PSOE… Todo ello interesante. Todo ello dudoso.

Ah, y otra cosilla: la columna que he publicado hoy en El Mundo no ha aparecido en estos Apuntes. Así que tendréis que mirarla en directo, si tenéis ganas de verla.

Escrito por: ortiz.2007/05/28 00:50:00 GMT+2
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